Porque, hay personas a las que nos gusta conectarnos con lo supremo a través de un con.tacto íntimo a través de la sexualidad, ya sea con uno mismo o con tu pareja o amante. Nos gusta vivir lo, experimentarlo, gozarlo y amarlo.
Esto sucede a través de ampliar nuestra consciencia y comprender que en los cuerpos de los amantes conscientes se generan unos portales multidimensionales.
Al amar tu cuerpo o en su caso, amar el cuerpo y el alma del ser con el que te compartes en ese instante sagrado, ese instante tan único, es donde los sentires se expanden y uno toca a DIOS en si mismo, y re.conoce a Dios en el otro.
Desde ese maravilloso lugar de conciencia, llamado y conocido como el contacto sutil con lo Supremo, con Dios (o el nombre que te resulte más real, para ti) es entonces cuando le podemos dar la «instrucción a toda esa gran cantidad de energía en movimiento, viva y activa» y desde esa conciencia, dirigirla hacía alguna parte de tu cuerpo, o quizá a algún lugar donde tengas alguna dolencia, incluso hacía algún proyecto, de esa manera se le da una dirección a la energía, resultando mucho mas eficaz su vitalidad y acción.
Entendiendo por sanación el re.equilibrio a nivel energético ya que la subida de vibración es evidente, es ahí cuando sucede que la energía por si misma actúa y si le unimos nuestra intención, «allí donde enfoques tu mirada y atención, el poder será mucho mayor»
Cuando eclosiona en ti, la energía orgásmica, es el momento de expandirla conscientemente hacia aquel lugar que te dicte tu corazón.
Entrando en el goce y el disfrute de compartir tu energía más poderosa con aquello que hayas decidido, agradeciéndolo, honrándolo. Ten completa confianza en que así,
Esta práctica es una manera de ir conociendo y profundizando en el poder de la intención. La energía sigue al pensamiento.
Texto de Carmen Cost
Bendiciones Bellezas