Querido y amado hombre
¿Sabes que cuando entras en una mujer, en realidad estás dentro de otro ser humano, estás dentro de ella? ¿Alguna vez te has dado cuenta de lo sagrado que es esto?
Que esto es lo más cercano a la unidad que alguna vez vas a experimentar, y que ella tiene ese regalo para ti.
Que puedes volver al útero y al punto de la creación. Que puedes plantar las semillas de la creación también.
Que cuando la dejas, ella siente la separación mientras te retiras físicamente y la dejas vacía.
Que ser permitido entrar dentro de ella es un regalo, un honor, algo sagrado, y que es tu trabajo saber, respetar y honrar esto.